Cómo aliviar el dolor de las quemaduras con remedios caseros


Las quemaduras de la piel son un problema bastante habitual acompañado de dolores más o menos intensos y que dependiendo de su grado pueden llegar a requerir atención médica para su curación.

En los casos más frecuentes, como las quemaduras leves que se producen cuando nos salpica algo de aceite o nos quemamos con el propio sol, normalmente no necesitaremos atención médica más allá de un remedio que nos ayude a aliviar el dolor y acelere la curación del tejido dañado.

En el artículo de hoy vamos a conocer varias soluciones muy eficaces para reducir el ardor y calmar el dolor asociado a las quemaduras superficiales, que aun siendo leves, suelen ser bastante molestas. Toma nota:

Remedios caseros contra las quemaduras

Rodajas de tomate

Además de ayudarnos a combatir las varices o atenuar las manchas de la piel, la pulpa del tomate, gracias a su gran riqueza en antioxidantes, resulta de gran ayuda a la hora de regenerar la piel quemada y refrescar la zona, reduciendo así el ardor y dolor asociado a este problema.

Corta una o varias rodajas de tomate y aplícalas sobre la zona afectada. Deja actuar durante 20-30 minutos y enjuaga después con agua fría. Repite varias veces al día.

Aceite esencial de lavanda

Las propiedades antibacterianas y analgésicas del aceite de lavanda lo convierten en un remedio muy eficaz para tratar las quemaduras, ya que además de ayudarnos a reducir el dolor, contribuye a acelerar la curación del tejido y evitar la formación de cicatrices.

Aplica un poco de aceite esencial de lavanda sobre la zona afectada y frótalo suavemente para que la piel lo absorba. Repite 2 o 3 veces al día.

Miel natural de abejas


La miel es uno de los productos con más propiedades que nos ofrece la naturaleza. Además de desinfectar la zona, nos ayudará a regenerar la piel y aliviar el ardor asociado a las quemaduras, actuando como una capa protectora que nos calmará al instante.

Aplica miel sobre la zona de la quemadura y cubre con una venda. Cámbiala cada 6-8 horas.

Jugo de cebolla

El gran poder antibiótico y cicatrizante de la cebolla hacen que este ingrediente sea muy útil para tratar todo tipo de problemas cutáneos, incluidas las quemaduras. Su riqueza en azufre le aporta así mismo un gran poder analgésico que nos aliviará de inmediato.


Machaca o licúa una cebolla para extraer su jugo y aplícalo mediante un suave masaje sobre la zona afectada. Repite varias veces al día.

Publicar un comentario

0 Comentarios